Esta operación militar fue totalmente innecesaria ya que los japoneses ya habían anunciado su rendición. Ante esta tesitura, surgen dos posibles explicaciones a semejante hecho: en primer lugar, a los americanos les interesaba destruir la capacidad de producción petrolera japonesa para que esta fuera todavía más dependiente en la posguerra. Por contra surge la posibilidad de que los altos mandos americanos desearan probar una serie de nuevas armas más mortíferas, pero eso ya no lo sabremos nunca.
Por irónico que parezca, al llegar la tripulación a la base tras el ataque, recibieron la noticia de que Japón se había rendido. Pobres individuos los que murieron en este último ataque que puso fin a la más sangrienta contienda que el hombre haya visto jamás.
Planta petrolífera de Tsuchizaki
No hay comentarios:
Publicar un comentario